La lentitud del magma
Pedro Luis Ibáñez Lérida*
"La muerte de cualquier hombre me disminuye porque
estoy ligado a la humanidad; por consiguiente nunca
hagas preguntar por quien doblan las campanas:
doblan por ti".
John Donne
"Poetas, mentirosos,
ustedes no se mueran nunca", así la voz de Jaime Sabines se hace
rotundo eco que traspasa su propia identidad lírica. Se reviste de locuaz
entendimiento humano para proferir contra sí mismo. En este bellísimo poema
titulado "Así es", la palabra poética se hace furiosa y
encendida plática, "los que estamos solos por todas partes, / los
sin nadie. / Los que no pueden dejar de destruirse, ésos no importan, no
valen nada, nada / que de una vez se vayan, que mueran pronto".
Confirma su deseo de fiera templanza, "A ver si es cierto: muérete.
/ ¡Muérete, Jaime, muérete!" Retuerce la faz de la miseria y la
convierte en puño, "Por ellos, y por los cansados que mueren lentamente
en / buhardillas y no hablan, y tienen
sucio el cuerpo, / altaneros del hambre,". El poeta
mejicano derrama el verso desde la altitud del deseo más profundo y herido,
"Una cosa esta en los labios de los niños, / que madura en la
boca de los ancianos, / débil como la fruta en la rama, / codiciosa
en la rama: / la humildad". Musito el poema mientras "Take
five" me envuelve. Su melodía intemporal deviene en reverberación. Ha
fallecido el compositor y pianista de jazz estadounidense Dave Brubeck. Sus
propias palabras son el mejor epitafio, "Una de las razones por las que
creo en esta música es que en ella la individualidad del hombre halla su camino
a través del ritmo del corazón. Y ese latido retumba por igual en todas partes.
Es lo primero que escuchas al nacer y el sonido con el que la vida te despide".
El montante de la
ayuda pública a la banca española por el trasunto crítico en el que nos
encontramos, asciende a 215.691 millones
de euros y suponen un 21% del Producto Interior Bruto. Todo un botín que se
convertirá en deuda. Por lo pronto ya lo es el rescate europeo cifrado en
48.500 millones de euros. Toda la confianza se pone en el denominado "banco
malo". Un entramado mercadotécnico cuya pretensión es suplir la
reacción política. Ahora todo pretende resolverse con cauces técnicos.Ya es
motivo de preocupación la denominación de lo que bien pudieramos calificar de
vertedero financiero. El nauseabundo hedor que despide este favor público no
encuentra ninguna corriente de aire fresco. Más bien lo contrario. El
expresidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales
-CEOE- recibió de Caja Madrid 26.600 millones de euros. Era miembro del Consejo
de Administración. Habría que preguntarse en manos de quienes estamos, cuando
el hoy encarcelado y otrora empresario de sólidos principios, incidía en la
siguiente afirmación, "hay que cobrar menos y trabajar más".
Estamos ante un "técnico" en la materia que como fórmula de
resolución de sus propios problemas esgrime el robo y el fraude. A la vista de
los acontecimientos, algo nada inusual. La proliferación de esta forma de hacer
se ha convertido en "patente de corso". Al final el criterio
se reduce a que no te pillen. Mientras tanto a tirar cohetes con pólvora ajena.
Sean aquéllos los pingües beneficios a costa de los despedidos de las empresas
que gestionó o que asesoró como la "nacionalizada" Bankia.
Afloran
12.000 millones de euros tras la invocación del gobierno en regularizar el
pecunio que no se hubiera declarado a la Agencia Tributaria. Los arrepentidos
han tenido la oportunidad de, con este gesto de magnánimo consuelo hacia las
arcas públicas, ver recompensada su cambio de actitud con el pago de sólo el 10
% de la cantidad ingresada. Es de
suponer que el gobierno pondrá, a partir de este momento el mismo y apasionado ahínco en
perseguir a los defraudadores que hace en aplicar los intransigentes recortes
económicos en sanidad, servicios sociales y educación, por poner ejemplos
paradigmáticos. La política de travestismo en la que se ha asentado ha tenido
su punto culminante con lo que más que un presagio era una maldición. Las
pensiones han sido devaluadas. En el bestiario político la ministra de Empleo
resulta patética en la defensa de un punto de vista tan distanciado de la
realidad, "Estoy convencida que los pensionistas van a valorar de forma
positiva el esfuerzo y el ejercicio de responsabilidad que este gobierno está
realizando".
"Y
en cuanto a los poetas, seguid a aquellos que van a la deriva". El
Corán precisa en su texto la magnificiencia de la palabra que no se
obceca en perseguir objetivos ciegos. La poesía enaltece la honestidad y la
transparencia de quienes reflejan el mundo abriendo la ventana a la realidad.
Sea esta el discurrir de los acontecimientos o el febril indicio del alma en
pugna con la tentación mundana. "Puedo decirles también / que no
hagan caso de lo que yo les diga. / El fruto asciende por el tallo,
sufre la flor y llega al aire / Nadie podrá prestarme su vida / Hay
que saber, no obstante, / que los ríos todos nacen del mar". La
pureza del lenguaje de Jaime Sabines
designa la verdadera esencia equidistante del cinismo, la hipocresía y
el desconcierto. Un ejercicio de claridad entre tanta confusión interesada.
*Pedro Luis Ibáñez Lérida,
poeta, articulista, coeditor de Ediciones En Huida. Contacto: pedrolerida@gmail.com
Artículo patrocinado por LetrasTRL
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